El Cuarto de Maravillas

Los Cuartos de Maravillas o Gabinetes de Curiosidades eran los lugares en los que durante la época de las grandes exploraciones y descubrimientos (siglo XVI y siglo XVII), se coleccionaban y se presentaban una multitud de objetos raros o extraños que representaban todos o alguno de los tres reinos de la naturaleza como se entendían en la época, animalia, vegetalia y mineralia, además de realizaciones humanas. Los cuartos de maravillas son los antecesores directos de los museos de la actualidad.

En general en los cuartos de maravillas se exponían las curiosidades y hallazgos procedentes de nuevas exploraciones o instrumentos técnicamente avanzados, como por ejemplo en el caso de la colección de objetos del Zar Pedro el Grande. Debido a ello, tuvieron un papel fundamental en el despegue de la ciencia moderna aunque reflejaban las creencias populares de la época (no era raro encontrar sagre de dragón o esqueletos de seres míticos). La edición de catálogos, generalmente ilustrados, permitían un acceso al contenido para los científicos de la época. Tuvieron gran importancia en el estudio temprano de ciertas disciplinas de biología al crear colecciones de fácil acceso de fósiles, conchas e insectos.

En otros casos se atesoraban cuadros y pinturas, como en el caso del archiduque Leopoldo Guillermo pudiendo ser considerados los precursores de los actuales museos de arte.

Los Cuartos de Maravillas o Gabinetes de Curiosidades eran los lugares en los que durante la época de las grandes exploraciones y descubrimientos (siglo XVI y siglo XVII), se coleccionaban y se presentaban una multitud de objetos raros o extraños que representaban todos o alguno de los tres reinos de la naturaleza como se entendían en la época, animalia, vegetalia y mineralia, además de realizaciones humanas. Los cuartos de maravillas son los antecesores directos de los museos de la actualidad.

En general en los cuartos de maravillas se exponían las curiosidades y hallazgos procedentes de nuevas exploraciones o instrumentos técnicamente avanzados, como por ejemplo en el caso de la colección de objetos del Zar Pedro el Grande. Debido a ello, tuvieron un papel fundamental en el despegue de la ciencia moderna aunque reflejaban las creencias populares de la época (no era raro encontrar sagre de dragón o esqueletos de seres míticos). La edición de catálogos, generalmente ilustrados, permitían un acceso al contenido para los científicos de la época. Tuvieron gran importancia en el estudio temprano de ciertas disciplinas de biología al crear colecciones de fácil acceso de fósiles, conchas e insectos.

En otros casos se atesoraban cuadros y pinturas, como en el caso del archiduque Leopoldo Guillermo pudiendo ser considerados los precursores de los actuales museos de arte.

Los Cuartos de Maravillas desaparecieron durante los siglos XVIII y XIX. Los objetos considerados más interesantes fueron reubicados en los museos de arte y de historia natural que se comenzaban a crear.

Grandes Cuartos de Maravillas:

  • El cuarto de maravillas del Collegio Romano, iniciado por el jesuita Athanasius Kircher, al que se sumó la donación de objetos curiosos realizada por Alfonso Donnini en 1615. Este cuarto de maravillas fue famoso en toda Europa.
  • La Kunstkammer de Ole Worm, creada en 1654 en Copenhage.
  • En el Castillo de Praga, el emperador Rodolfo II de Habsburgo reunió obras de los mejores artistas de los tres centros más importantes de renacimiento tardío: Italia, Países Bajos y el sur de Alemania.
  • El de Francesco Calceolari, naturalista del siglo XVI.
  • El del Conde Moscardo. El libro «Cose piu notabili» es un recorrido por este cuarto de maravillas.
  • El gabinete de curiosidades de Elias Ashmole, que donó la Universidad de Oxford en 1677, siendo el origen del Museo Ashmolean.

y ahora, también EL CUARTO DE MARAVILLAS DE LA CASA AZUL… nuestra particular SALA DE EXPOSICIONES – MUSEO.